miércoles, 23 de junio de 2010

Tuya

Estoy sola, pero ahora no estoy sin ti. Tu presencia es constante en mi vida. Me acuesto y acomodo mi cabeza sobre la almohada, como si fuese tu pecho. Te extraño.

Abrazo el aire. Un vacío que está lleno de tu amor. Te necesito.

Camino, camino mucho. Fumo más, a veces menos. Te pienso. Espero el día en que volvamos a estar juntos. Te siento. No necesito tenerte a mi lado para amarte, solo necesito amarte para tenerte a mi lado.

Te espero.

Aunque en realidad eres tú quien espera por mí, allá. Tan lejos. Tan cerca. No es difícil. Lo difícil ya se fue. Lo difícil ya vendrá. Pero ahora es diferente, nosotros somos diferentes. Lo difícil no da miedo.

Te amo. Y es por eso que te escribo, que te necesito, te pienso y te espero. Si no lo hiciera, no lo haría. Y es por hacerlo que me muero, que sin tenerte desaparezco, que por amarte me desenvuelvo... Por todo esto te pertenezco.

Miércoles 23 de junio de 2010.

No más romance

Ya no quiero hablarle al amor. Ya no quiero ilusionar con mis palabras. Ahora quiero destrozar los corazones y enfrentarme a las espantosas consecuencias. Quiero ser quien decepcione, quien traicione y perjudique. Pienso entrar en ti despacio y luego jugar con tus sentimientos.

Quiero hacerte llorar.

Debo vengar todas mis decepciones y documentar mi gran engaño. Debo adueñarme de ti y conocerte intensamente. Solo así podré herirte donde más te duela.

Pienso seducirte con mis mejores armas y luego hacerte suplicar. Usaré todas mis mañas y lograré hacerte llorar.

Te sentencio a sufrir las consecuencias de los traumas que me acompañan. Te condeno a una vida de dolor, sufrimiento y decepciones, tragos amargos, llanto y desilusión.

Vestiré de luto tu alma. Desgarraré tu abatido corazón. Jugaré nuevamente con tu mente. Suplicarás a mi nombre perdón. Y cuando haya terminado contigo sentirás que te mueres de amor. Mas no vuelvas nunca a mi puerta, pues cuando llames atenderá mi rencor.

Sábado 19 de junio de 2010.

miércoles, 16 de junio de 2010

-

El silencio es, a veces, la mejor respuesta.
"¿Para qué hablar cuando nadie te entiende?"
En la monotonía de las palabras
se pierde todo sentido de expresión
y asoma la incertidumbre de la equivocación.

Entonces callo. Callo y trago mi orgullo.
Entonces mi orgullo decrece. Decrece y me lamento.
Pero es un lamento silencioso. Entonces no es un lamento.
Pero en esta pseudo meditación me encuentro
Y encuentro que no me gusta lo que encuentro.

Jueves 03 de enero de 2008.

Singing blues

Por la carretera en tu convertible azul.
Sí.
El viento me hace cerrar un poquito los ojos.
Qué felicidad, qué energía... Qué paz.
Cómo me gusta cuando tocas mi cabello, sobretodo si empiezas por la nuca.
Me tomas por el hombro y me acercas hacia ti. Estoy protegida.

A dónde vamos no me importa, solo sé que estoy aquí.
Me importa más saber que tú también.
La música suena fuerte, pero le subo el volumen y empiezo a cantar para ti.

I remember the first time I saw you
The tears in your eyes look like they're tryin' to say
"Oh little boy you know I could love you
But first I must take my get away"

Me miras, confundido.
Te cojo de la cabeza y te doy un beso.
"No me voy a ningún lado".
Sonríes.
Nos amamos tantísimo...

Cierro los ojos y alzo los brazos para sentir el viento en ellos. Qué delicia.
De pronto, siento que el auto se va deteniendo.
Abro los ojos.
Te has estacionado a un lado de la carretera y te pregunto por qué.
Me miras, pero no contestas.
Sonríes. Me besas. ¡Qué beso!
Tus manos acarician mis mejillas mientras tus cautivantes labios me hacen olvidar todo.

Me abrazas.
"Nunca te voy a dejar ir", me dices.
"Yo lo sé", respondo.
Sonríes y vuelves a encender el auto.

Estamos de nuevo en camino.
Creo que no quiero llegar jamás.

Miércoles 16 de junio de 2010.

Bonheur

Gotas de mi sangre bañan tu rostro
y tú sólo te mantienes en pie.
Paralizado, estúpido... patético.

Tu sonrisa...
Lo has logrado.
Creo ver una lágrima caer,
pero qué ilusa soy.

Me miras hipnotizado
y vuelves a sonreír.
Mi cuerpo yace junto a ti, inerte.
Tú no te inmutas, sólo sonríes.

Me elevo.

Creo verte sonreír.
La lágrima sí rondaba tu mejilla,
pero estaba acompañada de esa sonrisa hipócrita que creí ver.

Eres feliz.
Y por un momento, yo también.

¿Será esto el amor?

Miércoles 16 de junio de 2010.

El vacío

Un hueco en el estómago. Miles de kilómetros bajo mis pies. Lluvia de meteoritos y lágrimas...

Miro hacia abajo. Vacío. Qué rica esta sensación. Vuelvo en mí y miro hacia abajo. Qué horrible esta sensación.

Me encuentro al final de una hoja sin palabras y sin embargo siento mi cabeza girar.

Estoy viva.

Lunes 26 de abril de 2010.

sábado, 12 de junio de 2010

Ocho

Si me escondo es porque noto
que tú quieres encontrarme,
aun sabiendo que no vuelvo
de tu amor a enamorarme.

Desde siempre te he anhelado.
¡Desde cuándo has importado!
Sin embargo a mi lado
desde nunca has estado.

Entre guerras y batallas
tú me ayudas a encontrarme.
Mas te pienso y no deseo
que imagines aún amarme.

Así que debo alejarme
y borrar todo pasado
será fácil si te alejas
si te alejas de mi lado.

No es tan simple como creo,
mas lo tengo decidido:
dejaré atrás los absurdos
y estas rimas sin sentido.

Viernes 11 de junio de 2010.